Belén y Fran se conocieron de niños cuando veraneaban en Cádiz. Años después sus destinos se cruzaron y tras ocho años de noviazgo dicidieron casarse. La petición de matrimonio fue muy especial y a los pocos días lo celebraron en París pasando su último aniversario de novios.

Paloma Cerezal supo captar perfectamente lo que Belén deseaba para su gran día. El chaquet de Fran fue obra de la Sastrería Jesús González, atreviéndose con un chaleco estilo escocés en tonos verdes. De su tiara se ocupó Leonor, de Tavieletta Hats, que consiguió hacer realidad lo que Belén tenía en mente. Los pendientes son heredados de su abuela, unos topacios increíbles que ella también había luciso en supropia boda. En cuanto a los zapatos, se decantó por un diseño de Rachel Simpson con un sutil color verde menta. De la peluquería se ocupó Aurelio Fernández, en quien también confiaron algunas invitadas de la familia. Del maquillaje se encargó Cristina Boy. Su ramo de novia fue realizado po Enea.

Se casaron en Jerez de la Frontera en la iglesia de San Dionisio. La celebración posterior fue en el Cortijo Señorío de Tabajete. El catering fue servido por Sayca. La boda fue muy emotiva y divertida, llena de detalles que Belén había realizado con mucho cariño e ilusión. El día de la boda era el cumpleaños de su abuelo, que sopló las 81 velas de su cumpleaños cuando su nieta le acercaba una tarta y los invitados cantaban feliz cumpleaños.  Disfrutaron de la fiesta con la música a cargo de un DJ y del grupo Los Viandantes, que les hicieron bailar toda la noche. De las fotos se encargó el equipo de M&O Photo, que consigueron captar todos los momentos inolvidables que vivieron ese día.

Vestido novia: Paloma Cerezal | Tiara: Tavieletta Hats | Peluquería: Aurelio Fernández Peluqueros | Maquillaje: Cristina Boy | Zapatos: Rachel Simpson | Flores: Enea | Catering: Sayca | Fotografía y video: M&O Photo | Chaquet novio: Sastrería Jesús González