Manuel y Cristina se casaron en Otoño y el blog les sirvió para encontrar ideas mientras preparaban su boda. Como sabéis soy una verdadera enamorada de las bodas de Otoño e Invierno, así que me apetecía mucho compartir esta boda con vosotras.

Cristina trabajaba como enfermera cuando Manuel, arquitecto de profesión, fue su paciente y fue un auténtico flechazo. Manuel le pidió matrimonio en febrero de 2015 y les preció que es mismo año sería perfecto.

Se casaron en la iglesia del Salvador de Leganés que tiene un precioso altar realizado por el arquitecto José de Churriguera, dónde también se habían casado los padres de Crsitina y dónde ella fue bautizada.

El lugar de celebración lo tenían claro, sería La Quinta de Jarama, ya que Manuel es buen amigo de su chef executive, así que sabían que era una apuesta segura y el resultado fue estupendo. La Quinta de Jarama goza de una maravillosa reputación pues ofrece un servicio impecable, pero en su caso fue absolutamente excepcional, les aconsejaron fenomenal, se encargaron de todo y resultó perfecto. Un servicio inmejorable.

Durante el cóctel contaron con el dúo Versión original, que interpretan versiones acústicas con canciones actuales y clásicos del pop en español y en inglés.

Después de realizar varias pruebas en diferentes ateliers, se decantó por Sole Alonso. El tipo de ceremonia, la iglesia y la fecha requerían un determinado vestido, además ella quería ir sencilla y elegante, con un toque clásico y tenía claro que quería llevar una preciosa estola de visón que le había regalado su hermano.

El tocado que llevaba fue realizado por Le Touquet, el modelo fue una clásica juliet cap. Deespués, para el baile, se puso una corona de hortensias burdeos preservadas realizada por ella misma. Los pendientes que llevaba fueron un regalo de sus abuelos, unas preciosas aguamarinas con diamantes engarzadas en oro blanco.

Para los zapatos confió en Franjul y fue todo un acierto, comodísimos y preciosos. Y su ramo de novia, un regalo de sus amigas, realizado por El jardín de Butarque, quienes también se encargaron de todos los arreglos florales de la iglesia.

Para el maquillaje contó con Pato de Bajobé, quien también le realizó varios tratamientos antes de la boda para cuidar su piel. Fue peonada por sus peluqueras de siempre de Peluquería Acuario.

Las fotos y el vídeo fueron realizados por el equipo de Elena Bau.