Carlos y María se conocieron a través de amigos comunes. Desde el primer día ella supo que había conocido al hombre de su vida.

Empezaron a salir y a los 8 meses, un 14 de Febrero, Carlos la sorprendió pidiéndole matrimonio. Fue el mejor regalo de San Valentín que podría haberle hecho.

Carlos y María residen en Santander, pero como buenos asturianos, sentían una gran devoción por la Virgen de Covadonga. Sus padres y abuelos se casaron en la Basílica de Covadonga y María siempre había tenido claro que se casaría allí.

María llevó el vestido que siempre había soñado. Era un vestido de crepe, cubierto con varias capas de tul de seda, con botones de terciopelo a juego con el bordado de flores rústicas. El velo era muy largo en tul de seda.

Quisieron darle un aire muy asturiano a su boda y también lo tuvieron presente en el catering. Contrataron unas azafatas para ayudar al acceso de los invitados en la iglesia y en el Parador. Para el sitting, en lugar de realizarlo de la forma habitual, usamos el sistema de identificar a los invitados en un listado y entregarles una tarjeta con el número de la mesa que les correspondía a la entrada del aperitivo.

Sin duda, el gran éxito de la música en directo. Versiones en español y en inglés, muy conocidas y comerciales y que abarcaban todas las épocas, edades y estilos, desde Elvis a Jerry Lee Lewis, pasando por los Beatles.

Fotografía: Click10

Vestido: Covadonga Plaza, Tocado: Le Touquet, Peluquería: Julio Suárez, Maquillaje: Lorena Carbajal, Ramo: Flores el Invernadero, Flores iglesia y decoración: MS Living, Celebración: Parador de Cangas de Onís, Música: The Third Floor, Fotomatón: Soyfotomatón