Hace unas semanas Nicolás, de Nicolás Costura, me envió unas imágenes de Loreto, una de sus novias, con la que había trabajado «a la limón» junto a Paula, de Tocados Le Touquet. Me encantó el resultado y me enamoré de estas instantáneas que hoy comparto.

Loreto y Miguel se casaron en la iglesia de Santa Eulalia de Selorio (Villaviciosa), un templo precioso con un arco de entrada románico que les encantó. La celebración posterior tuvo lugar en Castiello de Selorio. Del catering se encargó Sol Gimeno.

Las niñas que formaban el cortejo de Loreto llevaban vestido de plumeti con forro de seda rosa. Fue un diseño de su hermana Olaya y fue adaptado a las edades de las protagonistas (desde los 22 meses a los 8 años). Miguel llevaba smoking de Man Bilbao y pajarita verde oscura. Las flores, tanto en la iglesia como en la celebración, y al igual que su ramo y las coronitas de las niñas, eran de Pando Floristas.

En cuanto a su vestido, tenía claro que quería una blusa y una falda con mucha caída y muy etérea. Trasladó todas sus ideas a Nicolás sabiendo que estaba en las mejores manos, no en vano él ya había sido el autor del vestido de su prima y su hermana. El conjunto final constaba de una una falda de godets en tul con blusa de crêpe con mangas y espalda en georgette de seda natural, que se cambió para la fiesta por un body más ajustado con escote de pico. Complementó todo con un cinturón de Tocados Le Touquet, asimétrico de ramas de flores en las que se mezclaba el plata, el cobre y el rosa empolvado y al que decidieron añadirle, como toque final, unas mariposas que aún lo hicieron más diferente.

Del maquillaje se encargó Sonia Saborido. Para la peluquería confió en  Bárbara, de Barbareando. Un diez para ambas en todos los sentidos.

El fotógrafo fue Viti Amieva, acompañado de Hugo Álvarez. La empresa Auseger montó una espectacular carpa transparente con luces blancas de verbena unida a la entrada del cenador que ampliaba el espacio.

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